“La comida es la parte material de la alimentación, pero
el vino es la parte espiritual de nuestro alimento” (Alejandro Dumas)
Sin duda Don Alejandro nos regala una frase genial, logra
sintetizar un aspecto de una de las bebidas más universales del mundo.
Particularmente soy un apasionado del mundo del vino y al
leer esta frase se me ocurrió proponerles un viaje imaginario en el cual a través
de una cepa específica podamos recorrer el país. Visitar a través de ella las
principales regiones de producción de vinos de la Argentina y poder apreciar la
diferencia entre los distintos lugares donde se cultiva y procesa la uva.
Poder apreciar las diferencias, no solo en lo geográfico (Terroir), sino también en el tratamiento de la uva, el trabajo del viñatero,
del enólogo y de todos los factores que intervienen en la producción de tan
noble bebida.
A continuación les dejo una propuesta de menú en tres simples
pasos para que entre copa y copa puedan llenarse la panza viajando por nuestra
hermosa Argentina.
La cepa que elegí es: PINOT NOIR.
Entrada:
Pinot Noir vinificado en tinto de la región Sur, San
Patricio del Chañar, Neuquén.
“FIN”, 100% Pinot Noir – Bodega Del fin del Mundo
Maridado con unas bruschettas de queso crema y jamón
crudo.
Servicio a 16°/18°
Plato
Principal:
Pinot Noir vinificado en tinto de la región Norte, Salta.
“Lote Especial” 100 % Pinot Noir- Finca de Altura Bodega
Colomé.
Maridado con unos Roll de pechuga con farsa de panceta y
guarnición de mil hojas de papas.
Servicio a 16°/18°
Postre:
Espumante Pinot Noir / Chardonnay método Charmat ( me
parece más fácil de conseguir en el mercado) de la región de Cuyo, Lujan de
Cuyo, Mendoza
Altas Cumbres Extra Brut - Bodega Lagarde
Maridado con una Tarta de frutas secas.
Servicio a 4°/6°.